miércoles, 27 de enero de 2010

STONEHENGE


En medio de una verde pradera se erige este inquietante monumento de piedra de forma circular, que arqueologos e investigadores han tratado, en vano, de descifrar su utilidad y dar una explicación a su misteriosa disposición. Parece ser que se trataba de un templo o tal vez un observatorio astronomico, cuyo origen se data hace 5000 años, en el Neolítico, cuando la primera construcción de terraplenes circulares, foso y postes de madera se levanto con propósito desconocido.
Fue para el 2500 a. C en la edad de Bronce, cuando se sustituyeron las estructuras de madera por las piedras, sorprendentemente traídas de lugares muy lejanos, las piedras de sarsen provinientes del norte de Wiltshire y las piedras azules mas pequeñas del oeste de Gales. El traslado en si, de estos colosales monolitos desde lugares tan distantes, en una época tan remota, sin poseer los recursos tecnológicos que hoy en día disponemos, movió a muchos escritores del medievo a recurrir a la magia como explicación a su construcción, atribuyendo erróneamente su realización a los druidas.
Pero Stonehense es solo parte de un gran conjunto arquelógico constituido a su alrededor por túmulos funerarios y emplazamientos ceremoniales, distribuidos por las colinas circundantes asombrósamente consevados.
Es sobrecogedor observar, envueltos en una húmeda niebla estos círculos concéntricos de enormes piedras, dispuestas de manera precisa para que apunten en una dirección hacia la salida del sol durante el solsticio de verano y en la otra hacia la puesta del sol durante el solsticio de invierno y preguntarte porque motivo unos hombres supuéstamente tan primitivos tomaron la resolución de realizar semejante monumento